El factor Bernanke: otro Maestro que se cae del tabernáculo (página 2)
El Banco Central Europeo (BCE)
inyectó casi 400 mil millones de euros (WSJ – 7/8/07) para
créditos a corto plazo en el mercado monetario, la FED
estadounidense abrió la espita crediticia más de
400 mil millones de dólares (web.urgente24.com –
10/10/07), pero además, bajó claramente los
intereses y alargó el plazo de los créditos a corto
plazo. En todo el mundo se ha seguido el ejemplo. Aún si
con eso pareciera posible superar la crisis del mercado
monetario, lo cierto es que la crisis financiera mundial no ha
hecho sino comenzar (En la crisis de las punto com la "regadera"
llegó a los US$ 900.000).
Para cubrir pérdidas, los hedge
funds y los bancos venden los títulos que aún
conservan algo de valor; títulos petrolíferos o
títulos de metales. Muchos inversores conservadores del
mundo entero huyen buscando refugio en títulos seguros
(bonos estatales). Las operaciones en los mercados de valores se
aplazan, el mercado de nuevas emisiones se viene abajo, el
segundo motor del rally bursátil entra en la
"UVI".
Si las últimas señales que
provienen de los bancos (30/10/07) sirven como indicador, los
estragos provocados por las turbulencias en el mercado del
crédito podrían prolongarse por más tiempo
del que anticipaban muchos.
Los inversionistas reaccionaron con
optimismo a principios del mes de octubre cuando los principales
bancos del mundo anunciaron miles de millones de dólares
en pérdidas relacionadas, en su mayoría, a valores
respaldados por préstamos hipotecarios de Estados Unidos.
Las acciones de los bancos subieron ante la expectativa de que lo
peor había pasado. Ahora, sin embargo, eso ya no parece
realista.
Se creía que lo peor ya había
pasado y que el tercer trimestre sería una oportunidad
para que los bancos limpiaran su contabilidad, pero en la
última semana o dos, se ha vivido un resurgimiento del
nerviosismo y de la volatilidad y se han reavivado las
preocupaciones sobre el mercado de hipotecas de alto
riesgo.
En la tercera semana de octubre la firma de
calificación de riesgo Moody's Investors Service redujo, o
dijo que pronto reduciría, la calificación de
riesgo de miles de millones de dólares en obligaciones de
deuda colateralizada (CDO).
La banca de inversión no se
fía de la banca de inversión. O bien no
sabían, o si sabían no lo contaron. Ninguno de
estos escenarios es bueno. Tras las millonarias pérdidas
que han aflorado por la exposición a las hipotecas de alto
riesgo en varias de las principales entidades financieras del
mundo, el mercado se ha llenado de informes negativos que
recomiendan a los inversores mantenerse alejados del sector por
la percepción de que lo peor puede estar por
venir.
Las advertencias -que han provocado una
verdadera hecatombe en las cotizaciones de las primeras sesiones
de noviembre- cobran mayor relevancia si se tiene en cuenta que
proceden de las propias entidades implicadas en la crisis. El
analista Roger Freeman (de Lehman Brothers) recortaba el precio
objetivo de Merrill Lynch de 79 a 58 dólares y el de Bear
Stearns, de 145 a 117, por el esperado deterioro de los
fundamentales debido a las subprime. Debido a las pérdidas
de miles de millones de dólares, las acciones de las
firmas de Wall Street han caído en picada. El
índice Financiero de Dow Jones había caído
14% en el año, hasta principios de noviembre, frente a un
alza de 9% del Promedio Industrial Dow Jones.
La banca americana no es la única
víctima de la complicada situación del sector.
Goldman Sachs alertaba de una caída mayor en bolsa de la
banca europea por el deterioro de los mercados crediticio e
inmobiliario. "Habrá revisiones a la baja de las
estimaciones de beneficios. El ciclo bajista va a ser más
profundo y duradero de lo previsto", vaticinaba Oppenheilmer,
estratega jefe para Europa de Goldman Sachs.
Pero no son sólo estas noticias
sobre más posibles amortizaciones lo que está
causando los últimos brotes de temor y precaución
en los mercados. El motor real es la incertidumbre. La
instituciones financiaras no han sido totalmente francas acerca
de su exposición a este tipo de títulos y los
inversores han desarrollado una saludable desconfianza ante todas
las cifras que se les proporcionan. Es una situación
frágil, incluso peligrosa.
Hemos llegado aquí, desde luego,
debido a la crisis de crédito que en el último
verano de 2007 (en el hemisferio norte) ha absorbido gran parte
de la liquidez para los CDO relacionados con las subprime y hay
todavía una gran diferencia entre los bajos precios que la
gente ofrece por ellos y los que los bancos propietarios creen, o
esperan, que valgan.
El final del túnel dista aún
por mucho de estar a la vista. Bancos y hedge funds, en el mundo
entero, siguen quitándose de encima derivados crediticios
preñados de riesgo que habían financiado con dinero
japonés barato; los créditos tienen que ser
devueltos en yenes; entonces, se dispara hacia arriba el cambio
del yen y se hunden las cotizaciones en Tokio.
¿Vendrá ahora la crisis del dólar, y con
ella, la crisis del comercio mundial, con las consiguientes
consecuencias, para las economías exportadoras de China
(más otros países "emergentes") y Alemania
(más otros países europeos), en lo que respecta al
mercado estadounidense? Lo peor no ha pasado…
Animal Spirits: "Historias" de
ayer… y de hoy – ¿Aprendemos algo de las crisis? –
– ¿Estamos mal, pero vamos mejor? – La farsa
continúa… – Junio 2011
(Parte II) – De Greenspan a Bernanke (la
"regadera" y el "helicóptero")
Alan Greenspan (la era de la
"exuberancia irracional")
Párrafos extraídos de mi
Ensayo: Al "Maestro" con cariño (50 variables y
ningún rigor) Hagiografía -no autorizada- de Alan
Greenspan, mayo de 2005.
Introducción
"Los pecadores de Wall Street deben ser
castigados prontamente". (Alan Greenspan –
16/04/04)
"Es necesario tener cuidado al
reformular las reglas y las prácticas que ya no son
suficientes para afrontar la reciente ola de escándalos en
Wall Street…los legisladores deben evitar provocar
daños colaterales". (Alan Greenspan –
16/04/04)
"Algunas prácticas y reglas han
perdido su utilidad y requieren ser actualizadas. Pero al hacerlo
debemos ser cuidadosos y no erosionar el paradigma que ha
gobernado voluntaria y efectivamente las operaciones". (Alan
Greenspan – 16/04/04)
Un día, cualquiera, la bolsa
comienza a caer, el Nasdaq, cuyo oro relucía a más
de 5000 puntos, y pasa a boquear, arrastrándose por los
1800 (agosto/2001).
¿La culpa la tiene Greenspan que
pinchó la burbuja? ¿El batir de las alas de una
mariposa en China? ¿O es que el príncipe estaba
desnudo?
¿Es ésta una derrota
huérfana?
¿Es ésta una crisis
bursátil (especulativa) o una crisis
sistémica?
No es la primera vez que ocurren estos
eventos especulativos (primero), estos derrumbes caóticos
(segundo) y estas réplicas del temblor esperables
(tercero). Para sólo citar el pasado reciente: crac de
1987, minicrac de 1989, crisis de 1997, crisis de
1998…situación reciente.
Pero ahora la financierización de la
economía (hija putativa del librecambio y la
globalización) provoca estallidos más intensos,
más extensos, y de efectos más prolongados, por
mucho que les pese a los profetas del fin de los ciclos
económicos.
Ese es el drama de la Nueva
Economía, entre la velocidad y la verdad, entre lo
intangible y lo tangible, el mito, la fantasía y la
ilusión, han dejado a los actores de sí mismos
frente al crash, la recesión…la depresión.
Ahora la crisis lo contagia todo…
Intentaron pasar de los beneficios
decrecientes a la economía de escala creciente.
Apabullaron con pronósticos y
predicciones. Ayudados por los profetas de la nada
-perdón- FMI, BM, OCDE, OMC,… intentaron pasar del
mercado al supermercado.
Del arte de lo posible al arte de lo
imposible… El dominio despótico del Leviatán
económico.
En conocimiento de todo ello hace la Fed su
entrada… El guardián de dinero se transforma en el
guardián de la bolsa (que no es lo mismo)… Decide
atizar el fuego, acepta sembrar problemas para el futuro,
dándonos la razón a los que decimos que los
gobiernos son instrumentos de los capitalistas
financieros… dándonos la razón a los que
decimos que es la sociedad la que paga el precio del
rescate.
Los pesimistas (de ahora) tenemos
fundamentos para creer que existen defectos en el sistema
financiero actual que ponen en peligro la prosperidad
económica mundial. Los pesimistas (de antes) tenemos
pruebas para sostener que las crisis de la bolsa pueden ser los
desencadenantes de una recesión prolongada… y
más allá la depresión.
A todo esto la Fed opta por abordar el
problema de la confianza…
Ofrece crédito ilimitado… Se
dispone en forma incondicional y abierta a
proporcionarlo…
Que fluya el dinero…
¿Para quién? Para los
especuladores del parqué… Para los hacedores de
mercado… Para los mariscales de la derrota…
¿Por qué?… Tienen
ustedes la respuesta…
¿Para qué?…Tienen
ustedes la respuesta…
Ben Bernanke (la era del "quantitative
easing")
Del conundrum de Greenspan al conundrum
de Bernanke
El "Conundrum de Greenspan" y la liquidez
internacional
En febrero de 2005, Alan Greenspan, quien
presidía la Reserva Federal de los Estados Unidos,
dictó un discurso en el cual advirtió que se estaba
viviendo un "Conundrum" en las tasas de interés
norteamericanas. Esto se debía a que si bien la Fed se
encaminaba hacia su segundo año consecutivo de
apretón monetario (subiendo la tasa de referencia -Fed
funds-), las tasas de largo plazo no acompañaban esa misma
suba, sino que se mantenían inusualmente
incambiadas.
La causa principal que gestaba este
fenómeno era la abundante liquidez internacional que
procuraba bonos del tesoro norteamericano de largo plazo, y ello
conducía a un descenso de las tasas de interés que
pagaban estos instrumentos (simplemente por la ley de oferta y
demanda).
Esta liquidez que ha venido inundando al
mundo de dólares, se ha visto reflejada en tasas de
interés internacionales históricamente bajas,
así como un notable descenso en las primas de riesgo para
las economías emergentes, a la vez que se ha producido un
extraordinario aumento en el precio de los commodities (todos
efectos que han conducido a la bonanza actual en los
países emergentes).
Como es sabido, el gran ahorrador a nivel
mundial ha sido China que ha desarrollado un proceso creciente de
integración a las corrientes globales de comercio. Este
inmenso y nuevo ahorrador global ha acumulado reservas
internacionales en la forma de bonos del tesoro norteamericano de
largo plazo, cuyo objetivo principal ha sido no permitir apreciar
su moneda frente al dólar para favorecer a su sector
exportador. Sin embargo, mantener ese ahorro bajo la forma de
bonos estadounidenses ha tenido un inmenso costo de oportunidad:
el de invertir en activos más rentables tendiendo a la
eficiencia en el manejo de las reservas.
Bernanke da la vuelta al "conundrum" de
Greenspan… para mal
A pesar de la bajada de tipos a corto, la
subida a largo encarece las hipotecas y pone más
presión en la vivienda. ¿Se acuerdan del
"conundrum"? Pues bien, resulta que ahora ese "conundrum" empieza
a invertirse y a funcionar al revés. Es decir, ahora lo
que bajan son los tipos a corto plazo después de la
sacudida que metió Bernanke, los tipos a largo no bajan,
sino que suben. Es decir, tenemos otro "conundrum" sólo
que al revés del de Greenspan. Y puede ser
peor.
La razón que están citando
los analistas para este comportamiento de la deuda en los
últimos tiempos reside en los mínimos
históricos del dólar frente al euro y los
máximos del petróleo y otras materias primas. Ambos
elementos son claramente inflacionistas y eso, un repunte de la
inflación, es lo que anticipan los tipos de los bonos. No
hay que olvidar que uno de los riesgos que asumía Bernanke
con su bajada de tipos era precisamente una explosión
inflacionista o incluso estanflación (si además de
dispararse los precios, la actividad se estanca por la crisis de
crédito). Pero la Fed y Wall Street consideraron que era
más grave el riesgo de recesión que el de
inflación.
Más leña a la crisis
inmobiliaria
Este "conundrum invertido", aunque
está normalizando la pendiente de la curva de tipos y, por
tanto, aleja las perspectivas de recesión, dista mucho de
ser positivo para la economía. De hecho, es muy peligroso
si tenemos en cuenta que la mayor amenaza para la
economía, de la que deriva toda la crisis "subprime" y del
mercado de crédito, es la crisis del mercado
inmobiliario.
En EEUU, las hipotecas no se referencian a
un tipo a corto plazo como nuestro euribor (lo que hacemos
aquí es una aberración cuando hablamos de deudas a
30 años o más). Allí utilizan referencias
más lógicas, como los tipos de los bonos a 10
ó 30 años. Por eso, si estos tipos suben aunque la
Fed los baje a corto plazo, los que tienen hipotecas a tipo
variable verán encarecerse su pago mensual.
Y ya sabemos lo que va detrás:
aumentan los impagos -la mayoría de las hipotecas
"subprime" están a tipo variable- y los desahucios, lo
cual incrementa la oferta de vivienda y reduce a la demanda… y
finalmente, se retroalimenta la caída del precio de la
vivienda. Sin contar con el nuevo golpe para el gasto de consumo
que supone el aumento de la letra de la hipoteca, ya bastante
golpeado por la subida de los carburantes.
A Bernanke se le complica la vida. El
"conundrum" ha vuelto… pero al revés: suben los tipos de
interés
La interpretación inflacionista,
más negativa, es la que sostiene que los bonos descuentan
una escalada de los precios precisamente por culpa de una
política monetaria demasiado laxa. Esta explicación
está relacionada con el dólar, puesto que esta
política ha resultado en una debilidad del billete verde
que hace menos atractiva la inversión en activos en
dólares (como los bonos americanos) para los
extranjeros.
Es decir, justo lo contrario de la
explicación favorita de Greenspan para el "conundrum": que
el atractivo de los bonos americanos para los extranjeros (sobre
todo los países emergentes con grandes reservas de
divisas) mantenía altos los precios de la deuda y bajas
sus rentabilidades (que se mueven al revés que el
precio).
Una continuidad del fenómeno actual
hará subir más los tipos hipotecarios y
prolongará la crisis del mercado inmobiliario. Pero, por
otro lado, la creciente diferencia entre los tipos a corto y a
largo plazo (el empinamiento de la curva de tipos) hace
más rentable para los bancos prestar dinero a largo,
aunque tengan problemas para titulizar esos préstamos en
activos tal como está el mercado de crédito. Y eso
puede volver a poner en marcha la maquinaria del crédito
necesaria para que la economía vuelva a crecer.
Los analistas sostienen que el mercado de
viviendas va a tener que encontrar su piso y ninguna
disminución de la tasa de interés lo va a revivir
en el corto plazo. Pero en la medida que los mercados
continúen poniendo presión sobre la Reserva Federal
para que sea más agresiva, los riesgos inflacionarios
aumentarán y esto seguirá afectando las tasas de
interés de largo-plazo.
Por lo tanto, mientras que el "conundrum"
de Greenspan era que las tasas de interés de largo-plazo
no aumentaban después de que la Reserva Federal aumentaba
las tasas de corto-plazo, el "conundrum" de Bernanke parece estar
caracterizado por lo contrario, con las tasas de corto-plazo
disminuyendo y las de largo-plazo aumentando. Mientras que el
"conundrum" de Greenspan era problemático en sí
mismo, este nuevo "conundrum" es mucho peor porque pone en tela
de juicio la habilidad de la Reserva Federal de conducir una
política monetaria efectiva en caso de que la
economía de los EEUU entre en una recesión. Y como
las cuentas fiscales del gobierno de los EEUU están en tan
malas condiciones, esto dejará a la economía de los
EEUU con menos grados de libertad para reaccionar en caso de que
la crisis se expanda al resto de la economía. Se puede
argumentar que el gobierno puede aumentar los gastos fiscales
pero esto también afectará los intereses de largo
plazo, lo que hará más difícil la
versión actual del "conundrum".
En todo caso, la volatilidad del mercado
significa que no tiene nada claro cuál es el rumbo de la
economía y si la actuación de la Fed está
siendo la correcta. Al final, la respuesta y el futuro de los
mercados dependerán de si tienen razón los que
creen que la economía ya ha entrado en recesión o
los que piensan que no es así y que las rebajas de tipos
son una exageración que va a disparar la
inflación.
Imagining Keynes (It"s time to get
stimulated vs. ¡Take the money and run!)
(Parte II) – JMK: ¿ángel o
demonio? (ante el absurdo ionescano que va desde el "demasiado
grande para caer" -bancos- hasta el "demasiado grande para ser
rescatado" -países-) – Marzo 2012
La "resurrección" de Keynes (por
intercesión de apóstoles tardíos e inciertos
estructuralistas) – QE1, 2, Lite, Op. Twist, y otros
"relajamientos"… ¿para quién?
"Un buen banquero central es aquel que
retira el ponche cuando la fiesta se anima", frase
pronunciada por William McChesney, presidente de la Reserva
Federal entre 1951 y 1970.
John Maynard Keynes decía: "El
mercado puede permanecer irracional durante más tiempo del
que uno puede mantenerse solvente".
Decía Albert Einstein que
"locura es repetir una y otra vez lo mismo esperando
resultados diferentes".
Desaprendiendo a Keynes (entre tantas
medias verdades, que son siempre insidiosas) – Sense and
Sensibility (algunos cometarios finales, sin
Copyright)
Al libro de Keynes, "Teoría general
de la ocupación, el interés y dinero", como ya dije
antes, lo he leído cinco veces. A la mayoría de los
autores citados los leo casi a diario, y he podido seguir sus
opiniones sobre la crisis financiera a través de diversos
medios internacionales. Otra cosa es que me haya "enterado" de
algo… Pero sigo intentándolo.
Entre la nostalgia y la alarma, he podido
constatar que la mayoría de los prestigiosos "seguidores"
de Keynes (en su caso) ha promovido, justificado, o tolerado (por
decirlo suave), que se debe continuar suministrando droga al
drogadicto (banca). Todo sea para que no delinca (caiga),
dicen… Ha fomentado, aceptado, o apoyado (por decirlo
suave), que se pueda estimular a un muerto (banca zombi)…
Todo sea para evitar el riesgo sistémico (aunque
continúen delinquiendo), aseguran. Un vodevil
siniestro.
La mayoría de estos
("ilustrísimos señores") "piden más"
(gasto); en mi caso (perdón), con toda humildad
"pediría diferente" (manera de gastar), y recién
luego, si no alcanzara para incentivar la demanda, entonces
propondría un incremento del gasto. No es un
pequeño matiz. Es una forma totalmente diferente de
emplear los fondos públicos.
Tal vez por miedo (riesgo
sistémico), por vanidad (académica) o por
connivencia (donaciones, contratos, publicaciones,
cátedras, conferencias, congresos, premios…), han
transigido, han rumiado, y han encubierto el proceso de
"relajamiento cuantitativo".
Han consentido (casi todos) la
socialización de las pérdidas (de la banca) y la
privatización de las ganancias (de los bancos socorridos
con el dinero público), por parte de sus directivos (bonus
récord). La "cultura del maná", aplicada a los
bancos.
¿Y por qué se da dinero? Pues
porque el derrumbamiento de una institución crediticia
importante origina tal caos para el conjunto del sistema que es
mejor encogerse de hombros y sacarlo de los impuestos. Unas
medidas irracionales, en cualquier caso. Y es que son
múltiples las paradojas y círculos viciosos que de
ellas se desprenden. De Ricitos de Oro (2007) se ha pasado al
barón de Münchhausen (2011), en función de la
arbitrariedad política y sus oscuros intereses.
Lo de la "arbitrariedad política" va
de suyo: el TARP de Geithner, el helicóptero de Bernanke y
los diversos Quantitative Easing (1, 2, Lite…), el Twist
again, and so on…
Sobre lo "oscuros intereses", tomen nota de
la siguiente noticia y saquen sus propias conclusiones: "El
presidente de EEUU, Barack Obama, ha recaudado este año
para su campaña electoral más dinero procedente del
sector financiero y bancario que todos los candidatos
presidenciales republicanos juntos". (The Washington Post –
20/10/11).
Probablemente Keynes no hubiera aceptado
que los bancos que han sido ayudados con fondos públicos
siguieran comportándose como empresas privadas cuando sus
directivos deberían haberse convertido en funcionarios y
trabajar por los contribuyentes que han aportado para su
pervivencia.
Posiblemente Keynes hubiera propuesto que
el sector bancario debería regirse por el Código de
Hammurabi, que es la mejor regla de control del riesgo. No
supondría el "ojo por ojo", sino asumir las consecuencias
de las acciones llevadas a cabo y restablecer la simetría
entre las remuneraciones y el trabajo realizado. Los bancos
esconden el riesgo, ganan dinero, pagan bonus… Pero si la cosa
se colapsa, deben pagar el precio.
Seguramente Keynes les hubiera dicho
(grandes bonetes), que lo único "sistémico" es el
ciudadano, el contribuyente, el hombre de la calle, del que
muchos de ustedes (no digo todos), lamentablemente se han
olvidado. Eso es lo que tiene vivir en la torre de marfil de las
universidades de "la Ivy League", y no haber trabajado en una
empresa nunca, no haber tenido que pagar una quincena nunca, no
haber rodado por la puta calle nunca…
Finalmente (muchos, no digo todos), por
exceso (consintiendo la malversación de fondos
públicos) o por defecto (miedo de sostener ideas
políticamente incorrectas) han terminado "traicionado" a
Keynes. Lo han falsificado, desnaturalizado, adulterado,
amañado, desvirtuado, deformado, tergiversado. Han
"desaprendido" a Keynes, vamos.
El coste de los rescates bancarios y los
ingentes planes de estímulo aplicados por los gobiernos
para combatir la crisis ha ascendido a 13 billones de
dólares (hasta 2009), el 21,12% del PIB mundial (61,5
billones en 2008). Una deuda adicional de 1.897 dólares
por cada niño, mujer y hombre del planeta. Y ello, sin
contar con las inyecciones extraordinarias de liquidez aplicadas
por los principales bancos centrales. (Libertad Digital –
28/1/10)
En concreto, los rescates bancarios por
parte de los gobiernos (empleando dinero del contribuyente) ha
ascendido a 3,6 billones de dólares (el 5,73% del PIB
mundial) o, lo que es lo mismo, 515 dólares per
cápita. Mientras, los planes de estímulo han sumado
9,4 billones de dólares (el 15,39% del PIB mundial),
equivalente a 1.382 dólares por ser humano, según
un estudio elaborado por Grail Research and de Luxe &
Associates, para la prestigiosa Harvard Business
Review.
Según el informe, casi el 75% del
rescate bancario ha sido llevado a cabo por los países
occidentales, es decir, EEUU y las grandes potencias europeas. En
este caso, el coste de salvar el sistema financiero haciendo uso
del gasto público ha sido del 7,8% del PIB conjunto de
dichos países.
¿Cuánto se podría
haber incrementado el empleo con un aumento de la
inversión equivalente a 13 billones de dólares?
¿Por qué no se aplicó ese dinero para ayudar
a las familias que no podían pagar su hipoteca?
¿Por qué no se emplearon esos fondos en solucionar
los problemas de la economía real? ¿Se puede
restablecer así la confianza?
¿Por qué se intenta mantener
el mismo sistema financiero que ya fracasó? ¿Por
qué se admite que sigan mandando en los bancos los mismos
directivos que promovieron semejante estafa piramidal? ¿Es
ésta la forma de alcanzar expectativas
razonables?
La crisis ha puesto de manifiesto que es
necesaria una reorganización mundial del sistema
financiero, que pasa por volver al viejo mecanismo en el que los
bancos de negocios son para el largo plazo y el banco comercial,
para el corto "les guste o no". Creo que el único que
sostiene este postulado es Paul Volcker (ha declarado su
preferencia para reinstalar algunas de las divisiones entre la
banca comercial y de inversión que fueron eliminadas en
1999 con la revocación de la Ley
Glass-Steagall).
Además, opina también que a
la reforma se le debería dar una dimensión
internacional: Algunos acercamientos, tales como los
estándares de contabilidad, los requerimientos de liquidez
y de capital, y el registro y reporte de procedimientos,
deberían ser coherentes y acordados
internacionalmente.
El 26 de noviembre de 2008, fue nombrado
director del President's Economic Recovery Advisory Board
(Consejo para la Reconstrucción Económica) por el
presidente Barack Obama. El 10 de enero de 2011, Paul Volcker
abandonó el gabinete de Obama y con él desaparece
cualquier esperanza de que el Gobierno estadounidense consiga
domar el salvaje mundo financiero. Lo demás es
historia…
Aunque ser ahora keynesiano no es la
vía, me gustaría conocer sobre estos asuntos,
según la interpretación de los "apóstoles"
citados. Alguien, debería poner un poco de luz en medio de
las tinieblas. Dar voz al que no la tienen y renovar la
esperanza, de los que tienen hambre y sed de justicia. Un acto de
contrición, arrepentimiento y cambio.
Algo "políticamente incorrecto",
algo sacrificial, algo inmolatorio. Aunque, tal vez, sea
demasiado pedir (con tanto freno y marcha atrás,).
Así y todo, continúo esperando…
– Entonces… (iniciativas de
desempeño aberrante)
La crisis financiera mundial puso al
descubierto defectos del capitalismo al estilo estadounidense,
las insuficiencias de lo que los británicos apodaron como
la regulación financiera "leve" y la tendencia del sistema
hacia cometer excesos periódicos. Más
recientemente, la crisis de la deuda soberana de Europa puso de
relieve la tensión de un costoso estado de bienestar en
ausencia de un vigoroso crecimiento económico que lo
financie.
El modelo de EEUU continúa en
dificultades tres años después de que los
reguladores dejaran que Lehman Brothers se hundiera. Miles de
millones de dólares duermen ociosos en las arcas de las
empresas, a pesar de que millones de trabajadores se hallan
desempleados desde hace más de un año. El mercado
inmobiliario sigue deprimido. La parálisis política
en materia fiscal socava la autoridad económica en EEUU.
Todo esto y más ha debilitado el argumento más
simple a favor del modelo económico de EEUU: el hecho de
que funciona.
El modelo europeo tampoco ofrece
demasiado. En uno de los momentos más reveladores de 2011,
Klaus Regling, que dirige el fondo de rescate de la zona euro,
fue enviado en busca de dinero no a Washington, sino a Beijing.
La misión no produjo resultados, pero sí
provocó arrebatos de desdén por parte de algunos en
China sobre las imperfecciones en el modelo europeo. En una
entrevista con Al Jazeera TV, en noviembre (2011), Jin Liqun,
director de la junta supervisora del fondo soberano China
Investment Corp., se refirió a Europa como una "sociedad
de bienestar agotada".
El modelo japonés, impulsado por
las exportaciones, en su día la envidia de casi todas las
demás economías, ha sido en gran medida descartado,
como consecuencia de una década de luchas para reactivar
el crecimiento. Si a eso sumamos el golpe asestado por la
calamidad nuclear de Fukushima Daiichi, provocada en marzo (2012)
por un tsunami y un terremoto, resulta que la reputación
de Japón en términos de competencia y eficiencia se
vio gravemente perjudicada.
¿Pero existe una alternativa bien
articulada al capitalismo de mercado de los países
(anteriormente) ricos?
Por ahora, los países
(anteriormente) ricos están demostrando que no aprendieron
la lección, y continúan actuando con "lentitud,
parsimonia y vacilación"…
2 – "Helicopter" Ben (cadena de favores:
todo sea por la banca)
– "Speculative attacks" (Bajemos al
quiosco)
(Tras las huellas de "Hamelin" por el
"apetitoso" jardín del Quantitative Easing: una
selección -libre y parcial- de la hemeroteca
reciente)
"Facta, non verba" (sólo se
citan algunos artículos referidos a la Fed o Ben
Bernanke)
"El BCE adjudicó en una subasta
de financiación rápida llamada de "ajuste fino",
94.841 millones de euros, cantidad que supera los 69.300 millones
de euros inyectados el 12 de septiembre de 2001, un día
después de los atentados de Nueva York"… El
BCE efectúa una inyección histórica de
liquidez para tranquilizar al mercado (Gaceta.com –
10/8/07)
Al mismo tiempo, la Reserva Federal
estadounidense (FED) puso a disposición del sistema
financiero 24.000 millones de dólares en reservas
temporales, la mayor cantidad desde el pasado junio, tras un
aumento muy rápido de la demanda de efectivo de bancos
como consecuencia de las pérdidas por las hipotecas de
alto riesgo o subprime de EEUU…
… "La única manera de
evitar que este fenómeno provoque un efecto dominó
y pueda convertir la crisis en sistémica o estructural
está en los libros: las autoridades monetarias deben
acudir como prestadores de última instancia a inyectar
liquidez a los bancos y, además, socorrer a aquellas
entidades o fondos que tengan problemas de caja", indicó
el presidente de Fimades, Luís Palma Cané. Fue
exactamente lo que sucedió"… Nuevo temblor en los
mercados mundiales (lanacion.com – 12/8/07)
La Reserva Federal (FED), el Banco Central
Europeo (BCE), junto a los bancos centrales de Japón,
Suiza, Canadá y Australia liberaron cerca de US$ 350.000
millones. "Enviaron un mensaje: algunos inversores van a perder
plata, pero no se preocupen que no se va a trasladar al sistema
financiero y a la economía real y si es necesario vamos a
poner más plata", apuntó Eduardo Blasco, socio de
Maxinver Consultores.
Un informe de Deloitte considera que los
bancos centrales "tienen suficiente margen de acción y
credibilidad como para inyectar toda la liquidez que haga falta
para desbaratar una corrida". Ese margen comprende una posible
baja en la tasa de interés…
"Los problemas crecientes en los
mercados de crédito y la volatilidad en las bolsas han
llevado a que Wall Street ponga la mirada en Washington en busca
de un rescate. Pero el gobierno de George W. Bush rechazó
dar un paso concreto: expandir el poder que tienen Fannie Mae y
Freddie Mac -dos gigantes semi-gubernamentales en el mercado de
préstamos inmobiliarios- para comprar hipotecas. En vez de
ello, Bush y el secretario del Tesoro Henry Paulson han tratado
de reforzar la confianza al hacer hincapié en la fortaleza
de la economía global"… Los mercados buscan el
apoyo de la FED para enfrentar la tormenta del crédito
(The Wall Street Journal -online- 13/8/07)
Hasta ahora, la respuesta más
significativa ha sido la de la FED, el BCE y otros bancos
centrales, que han inyectado miles de millones a los mercados
monetarios para que la escasez de crédito no haga subir
las tasas de interés de corto plazo. Se trata de la mayor
maniobra de este tipo desde los ataques del 11 de septiembre de
2001…
¿Qué más pueden hacer
las autoridades de EEUU? El siguiente paso sería que el
presidente de la FED Ben Bernanke -cuyo trabajo académico
se ha centrado en los errores cometidos por el banco central
durante la Gran Depresión de los años 30 y en las
maneras en las que los mercados financieros pueden afectar al
resto de la economía- bajara las tasas de interés
para abaratar los préstamos y aumentar la
liquidez…
Entre los grandes temores figuran que las
grandes firmas están expuestas a mercados de una manera
que ni siquiera éstas conocen o, al menos, no divulgan.
Otro temor es que firmas altamente apalancadas se vean forzadas a
deshacerse de sus participaciones, empeorando aún
más las cosas.
Un rasgo inusual de la actual crisis es que
los problemas comenzaron en EEUU en el mercado de hipotecas
subprime, pero parecen afectar con mayor gravedad a Europa. Por
eso el BCE ha sido más agresivo que la FED en inyectar
dinero a los mercados para aliviar las tensiones. Y fue el
gobierno alemán, no el de EEUU, el que tuvo que organizar
el rescate de una entidad en problemas, IKB Deutsche Industrie
Bank AG, que había invertido fuertemente en valores
estadounidenses respaldados por hipotecas.
Algunos funcionarios de la FED temen que si
reducen las tasas ahora, enviarán la señal de que
la entidad está más preocupada por los mercados que
por la economía. Algunos analistas sospechan que Bernanke
es reacio a bajar las tasas con el fin de expurgar el llamado
"Put Greenspan", un término acuñado por Wall Street
que refleja la supuesta disposición del ex jefe de la FED
a recortar las tasas y rescatar a los inversionistas de sus
propias decisiones erradas. Pero Bernanke, dicen los analistas,
se basará en consideraciones convencionales: crecimiento,
inflación y estabilidad financiera…
"Ben Bernanke y Jean Claude Trichet
-presidentes, respectivamente, de la FED y del BCE- han hecho
esta semana algo que nadie en el sector privado haría:
comprar "collateral debt obligations" (CDO), productos
financieros derivados cuyo valor depende, en muchos casos de las
hipotecas concedidas a maltrechos propietarios de viviendas
estadounidenses de bajos ingresos, los llamados "subprime". La
mega-inyección de liquidez de las últimas horas en
los mercados financieros -alrededor de 120.000 millones de
dólares en dos días ha incluido la compra de CDO
entre otras clases de deuda de elevado riesgo"…
Sólo los bancos centrales compran (lavanguardia.es –
13/8/07)
"Las innovaciones en el sector financiero
han creado una expansión de la capacidad para distribuir
el riesgo (…) y permitir una amplia gama de transacciones
financieras que jamás habrían sido posibles en el
pasado", afirmaba Raghuram Rajan, economista de Chicago, en una
entrevista concedida a "La Vanguardia" a primeros de este
año (2007). "Pero, a pesar de las apariencias, el riesgo
está ahí afuera, no desaparece
-añadía-, con los que estamos ante un riesgo
sistémico".
La advertencia de Rajan parece haber
resonado en los consejos de los bancos centrales a lo largo de
los días subsiguientes…
"El goteo de entidades de EEUU con
problemas para cobrar las cuotas de las hipotecas concedidas a
personas con un mal historial crediticio, las ya tristemente
famosas subprime, comenzó en el mes de abril con la
suspensión de pagos de New Century. Era un aviso que tres
meses más tarde se ha convertido en una crisis de liquidez
en todo el planeta que ha obligado a actuar a las principales
autoridades monetarias del mundo"… Los supervisores de
EEUU llegaron tarde al problema de las "subprime" (negocios.com –
14/8/07)
¿Qué ha hecho en ese tiempo
la FED? Pocas cosas y algunas demasiado tarde. El origen de las
turbulencias en los mercados de crédito está en
EEUU, en las mencionadas hipotecas subprime que se concedieron de
forma indiscriminada durante la época del boom
inmobiliario, en 2005 y 2006. En esos años, la
concesión de hipotecas de alto riesgo se triplicó.
Y la posterior desaceleración del precio de la vivienda,
la subida de los tipos de interés y la menor tasa de
crecimiento económico se ha traducido en un aumento de la
morosidad que ha afectado a los títulos respaldados por
esos préstamos (titulización).
Esa ha sido la correa de transmisión
que ha llevado la crisis a todo el mundo a través de los
fondos de inversión y de las entidades que invierten en
esos activos. Pero la FED hasta ahora no se había
preocupado seriamente de los criterios con los que se
concedían esos préstamos que se están
convirtiendo en fallidos. No ha sido hasta prácticamente
hace 15 días, el 17 de julio, cuando la autoridad
supervisora anunció medidas para mejorar la
supervisión de este mercado. Un proyecto que,
además, no se pondrá en marcha hasta el cuarto
trimestre de este año (2007). Quizá para entonces
las entidades a supervisar sean menos…
"Wall Street tiene un sueño: que
la Reserva Federal rescate a los mercados financieros mediante un
drástico recorte en las tasas de interés"…
¿Está la FED atrapada en un "riesgo moral"? (The
Wall Street Journal -online- 14/8/07)
Detrás de ese sueño se
esconde algo llamado riesgo moral (moral hazard). Se trata de un
antiguo concepto económico que tiene sus raíces en
la industria aseguradora. La idea es la siguiente: si uno protege
a alguien demasiado bien en contra de un resultado no deseado,
esa persona podría comportarse de manera imprudente. Por
ejemplo, una persona que compra un cuantioso seguro para su auto
podría manejar demasiado rápido porque se siente
protegida.
En estos días, los inversionistas y
economistas usan el término para referirse al anhelo de
los mercados por un recorte de las tasas de interés. Si
los inversionistas creen que la FED los rescatará de sus
excesos, asumirán riesgos mayores y, al final, se exponen
a consecuencias mayores. Algunos piensan que la FED creó
este problema en 1998, 1999 y 2003.
Si la FED bajara la tasa ahora, ciertamente
ayudaría a enfrentar la actual crisis de mercado al
proveer dinero barato. Wall Street es un lobby poderoso en
Washington y para los políticos no es fácil
resistir a su petición de ayuda, ya que sus
campañas electorales muchas veces dependen de las
contribuciones monetarias de la banca instalada en Nueva York.
Pero los escépticos temen que si la FED encabeza el
rescate, alentaría a que los inversionistas especulen
todavía más, creando una burbuja aún
más grande.
"A uno no le gustaría que la FED
rescatara a esta gente que ha ganado tanto dinero…", dice
un experimentado operador bursátil de Nueva York. "Por
otro lado, a uno no le gustaría que la economía
caiga en recesión".
Ese es, en esencia, el dilema que enfrenta
la FED…
"La tensión en los mercados ha
sido evidente durante semanas, pero el jueves pasado fue
distinto. A medida que el día llegaba a su fin, papeles
comerciales denominados en euros -una deuda a corto plazo emitida
por las empresas- por un valor de US$ 45.000 millones necesitaban
cambiar de manos debido a su fecha de expiración. Los
corredores normalmente encuentran compradores para esta clase de
valores antes de la hora del almuerzo en Londres, equivalente a
las 7 de la mañana en Nueva York. Pero esa mañana
amaneció sin demanda y les tomaría todo el
día vender apenas el 42% del total, según una
fuente familiarizada con el mercado"… Tras un
día de sustos y reacciones en cadena, la FED salió
a tender la mano (The Wall Street Journal -online-
20/8/07)
Justo antes del mediodía, hora de
Nueva York, casi al final de la sesión de corretaje en
Londres…en un signo de desesperación y como un
grito de auxilio dirigido a la Reserva Federal de Estados Unidos
(FED), los inversionistas empezaron a concentrarse en los valores
del Tesoro más seguros y a corto plazo. El rendimiento
sobre los bonos a tres meses, los cuales se habían
cotizado en 4%, cayó hasta 3,4% y la brecha entre los
rendimientos de las notas del Tesoro y los papeles comerciales
corporativos se amplió mucho… "Fue un giro
extraordinariamente violento, y se hizo evidente que el mercado
estaba a punto de angustia y que esperaba una respuesta por parte
de la FED"…
Estas reacciones reflejaron uno de los
días más peligrosos para los mercados globales de
crédito desde 1998. El viernes por la mañana, la
FED cedió. Sólo 10 días después de
declarar que la economía de EEUU no necesitaba de su
ayuda, la institución decía que "los riesgos al
crecimiento han aumentado considerablemente" sugiriendo que
podría recortar su objetivo para las tasas a corto plazo.
En una medida inusual, la entidad animó a los bancos a
tomar prestado directamente de la FED a través de una tasa
de descuento, incrementando el atractivo de esos
créditos.
Hoy la FED sabrá si hizo lo
suficiente para resucitar la confianza que escaseaba tanto la
semana pasada, lo cual quedó de manifiesto en la
reticencia de los inversionistas a comprar o aceptar como
colaterales los valores que en tiempos normales no se
habrían puesto en duda…
El último capítulo en la
crisis del crédito de 2007, cuyo origen está en el
deterioro del mercado de las hipotecas de alto riesgo o subprime,
comenzó el martes 7 de agosto en Europa. Poco
después de las 9 de la mañana, en la segunda planta
del Banco Central Europeo en Fráncfort, el banco
repartió US$ 394.630 millones en su operación
regular de financiamiento. Al final del día y a pesar de
que los bancos de la eurozona tenían efectivo de sobra
gracias a las operaciones de refinanciación de la
mañana, las tasas de los mercados monetarios iban en
alza…
"Piense en el presidente de la Reserva
Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, como el mecánico
que revisa el motor de la economía estadounidense.
¿Su dilema? Tiene las herramientas de un auto Ford T de
comienzos del siglo XX para arreglar un híbrido controlado
por una computadora del siglo XXI"… Por qué la
crisis es un dilema para Ben Bernanke (The Wall Street Journal
-online- 23/8/07)
La FED se creó en 1913 y obtuvo las
herramientas para prevenir y responder a pánicos
bancarios… El desafío de Bernanke es que hoy en
día los bancos no son el principal problema. Estos
están repletos de dinero, pero son reacios a prestar justo
cuando las otras instituciones que tienen dinero también
se sienten inseguras de dar dinero. Así que Bernanke y sus
mecánicos monetarios están usando herramientas del
1913, diseñadas para un sistema financiero centrado en los
bancos, para arreglar en 2007 un sistema financiero centrado en
los mercados…
Cuando el crédito comenzó a
escasear, la primera movida de Bernanke fue inyectar dinero a los
mercados monetarios de muy corto plazo. Cuando el motor no quiso
arrancar, usó otras herramientas a su disposición,
como bajar las tasas de interés que se aplican a los
préstamos que los bancos piden a la FED. Después,
probó las armas de la persuasión. Entonces,
¿funcionan las herramientas de la FED? Es demasiado pronto
para saber. Lo único cierto es que el sistema financiero
del siglo XXI vino sin un manual de reparaciones. Bernanke lo
está redactando ahora.
"Cuando Ben Bernanke fue nominado para
presidir la Reserva Federal de Estados Unidos en 2005,
prometió "mantener la continuidad con las políticas
y las estrategias establecidas durante los años de
Greenspan". Pero al enfrentar su primera crisis financiera,
Bernanke ha mostrado indicios de un claro quiebre con Alan
Greenspan, quien dirigió los destinos de la FED entre 1987
y 2006"… Ben Bernanke se aleja de las recetas de Alan
Greenspan y fija un nuevo rumbo para la FED (The Wall Street
Journal -online- 30/8/07)
El giro es importante para entender los
motivos por los cuales no ha recortado la tasa de interés
de referencia. Además, podría alterar la
percepción de los inversionistas sobre el funcionamiento
de la FED bajo la batuta de Bernanke…
La FED ha cumplido históricamente
dos grandes funciones: mantener la estabilidad financiera y
controlar la inflación sin desatar una recesión.
Para Greenspan, la confianza del mercado estaba tan entrelazada
con las perspectivas de la economía que a menudo era
imposible distinguir entre una y otra. Greenspan redujo las tasas
de interés después del crash bursátil de
1987 y el rescate de última hora del fondo de cobertura
Long Term Capital Management en 1998, para impedir que la
aversión de los inversionistas al riesgo mermara el
crecimiento de la economía.
Bernanke, en cambio, hace una
distinción entre ambas funciones. El 17 de agosto, por
ejemplo, recortó la tasa de interés que la FED
cobra a los bancos que piden prestado al banco central y
amplió el plazo de los préstamos de su ventana de
descuento. Pero la FED no ha reducido la tasa interbancaria, que
es mucho más importante para la economía y es la
referencia obligatoria de todos los préstamos de corto
plazo en EEUU…
"El presidente de la Reserva Federal de
Estados Unidos, Ben Bernanke, optó por encarar de manera
agresiva el enfriamiento de los mercados de crédito, que
amenazan con afectar a la economía estadounidense, al
decretar un sorpresivo recorte de medio punto porcentual en las
tasas de interés de corto plazo. Con esto, Bernanke ignora
de momento a los críticos que dicen que un recorte
sólo sirve para rescatar a los inversionistas de sus
decisiones irresponsables"… La FED reduce la tasa y las
bolsas celebran, aunque la presión inflacionaria persiste
(The Wall Street Journal -online- 19/9/07)
La decisión muestra que Bernanke
piensa que las turbulencias del mercado que comenzaron en agosto
(2007) podrían provocar un daño económico
mucho mayor. Además, el presidente de la FED
también demuestra que su estilo y táctica son mucho
más cercanos a los de su antecesor, Alan Greenspan, de lo
que muchos pensaban. Sin embargo, con ello viene un riesgo. Es
probable que los críticos comiencen a hablar de un
"Bernanke put", así como antes se referían al
"Greenspan put" (una opción "put" protege al tenedor de un
valor de una pérdida de su inversión). Pero eso le
preocupa menos a Bernanke que mantener la economía
estadounidense a flote…
Los recortes, que fueron mayores a los que
muchos economistas anticipaban, provocaron una euforia
bursátil en Wall Street. El Promedio Industrial Dow Jones,
que había subido 70 puntos antes de que se anunciara la
decisión de la FED, saltó 335,9 puntos, un 2,51%,
para cerrar en 13.739 unidades. Fue el mayor aumento porcentual
en un día desde 2003"…
Si Bernanke recorta la tasa interbancaria,
como lo anticipa el mercado, el contraste con Greenspan se
desvanecerá y algunos lo criticarán por actuar en
forma tardía…
Las reacciones a las tácticas de
Bernanke han fluctuado entre las acusaciones de que él es
un académico incapaz de ver las consecuencias de una
contracción del crédito, a alabanzas por obligar a
los peces gordos de Wall Street a pagar las consecuencias de sus
imprudencias.
Tal vez a la FED no le quede más
remedio que bajar las tasas. Pero mientras más se demora,
mayor es la probabilidad de que disipe la presunción
automática de los inversionistas de que las convulsiones
del mercado conducen inexorablemente a una reducción de
tasas. Ya hay indicios de que la estrategia empieza a rendir
frutos…
"El medio punto porcentual de recorte
aplicado por el Comité Federal de Mercado Abierto al tipo
objetivo de los fondos federales y al tipo de descuento no estaba
justificado por las turbulencias del mercado. Con los precios de
las materias primas y el petróleo, disparados y un
dólar débil, se arriesgan a reanimar la
inflación. O bien el presidente de la FED, Ben Bernanke,
ha cedido a la presión de Wall Street o cree que la
economía de EEUU se está estancando gravemente. En
cualquier caso, la subida del mercado parece
equivocada"… La FED sabe algo que nosotros no sabemos
(Negocios.com – 20/9/07)
"Las dos cabezas visibles de la
economía norteamericana, el presidente de la Reserva
Federal (FED) Ben Bernanke y el Secretario del Tesoro de Estados
Unidos Henry Paulson, comparecieron ayer ante el Comité de
Servicios Financieros de la Cámara de Representantes para
hablar, entre otros temas, de la crisis hipotecaria de alto
riesgo o subprime. El posicionamiento del presidente de la FED ha
sido claro: "las pérdidas financieras globales han
excedido incluso las estimaciones más pesimistas sobre las
pérdidas de los créditos"… Bernanke
reconoce que las pérdidas superan los cálculos
más pesimistas" (Negocios.com – 21/9/07)
Por su parte el Secretario del Tesoro, se
limitó a reconocer que la crisis tendrá un efecto
"modesto" en el crecimiento de la
economía…
"El ex jefe de la Reserva Federal Alan
Greenspan negó que los reguladores del mercado hayan
fracasado a la hora de predecir los problemas que causaron la
reciente crisis global"… Greenspan, para nada sorprendido
(BBCMundo.com – 28/9/07)
En una entrevista con la BBC, Greenspan
dijo que las autoridades no habían respondido a los
temores que los fondos de alto riesgo despertaban porque
sólo las personas ricas invertían en
ellos.
El hombre que llevó las riendas del
banco central estadounidense también habló del
estado general de la economía mundial y dijo que cada vez
se sentía más pesimista en cuanto a su futuro. Sin
embargo, agregó que la posibilidad de que la
economía entrase en recesión todavía era
menor del 50%.
La crisis crediticia se ha sentido a nivel
global y, según señaló recientemente el
director del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, los
efectos más grandes de la crisis se presentarán en
el año 2008 en la economía de Estados
Unidos.
Una de las causas de esta crisis fue la
consolidación y venta de deuda proveniente de hipotecas de
alto riesgo (subprime), que se vendieron a clientes de bajos
recursos que en muchos casos no podían pagarlas. Cuando
muchos ya no pudieron hacer frente a las cuotas de estas
hipotecas, los bancos y casas de inversiones que habían
comprado esas deudas como inversión entraron en problemas.
Como medida de protección, los bancos que se vieron
afectados se volvieron más renuentes a prestar fondos, lo
cual hizo que la crisis crediticia se acentuara.
"Nosotros sabíamos lo que
sucedía. La razón por la que no hicimos nada fue
porque, en gran medida, la gente que participa de este tipo de
prácticas atroces (comprar deuda de alto riesgo) es gente
que invierte su propio dinero", dijo Greenspan a la
BBC.
"Los mayores culpables de todo esto, se
supone, son los fondos de alto riesgo, que son instituciones en
las que invierte gente que tiene mucho dinero". "Debo decir que
no me preocupa mucho que el patrimonio neto de estas empresas
caiga de US$ 40 millones a US$ 5 millones, que es lo que
sucedió en muchos casos", agregó
Greenspan.
El ex jefe de la Reserva Federal
también predijo que la era de inflación baja estaba
llegando a su fin. "No puedo decir exactamente el momento en que
sucederá, pero estoy bastante seguro de que la
tranquilidad inflacionaria que hemos experimentado durante los
últimos 20 años no es algo que se repetirá
en el futuro", concluyó.
"Respira otra vez el sistema con tal de
mantener como sea un nivel adecuado de liquidez. En total ya
suman US$ 427.475 millones los colocados en el sistema por parte
de la Reserva Federal de USA. Ahora, la entidad acaba de realizar
la primera inyección de la semana con el anuncio de otros
US$ 12.500 millones en reservas temporales al sistema bancario,
vía acuerdos de recompra a un día"… La
FED vuelve a acaparar la atención de Wall Street: nueva
inyección de US$ 12.500 millones (urgente24.com –
9/10/07)
De esta manera, el optimismo vuelve a
reinar en Wall Street. Esta mañana los inversores tomaron
posiciones en el mercado neoyorquino a la espera de que la
Reserva Federal publique las actas de su última
reunión en las que podría desvelar algunas pistas
sobre cuál será su decisión en la cita de
octubre…
"Es curioso observar como el mercado de
valores del país donde se desató la actual crisis
es el que mejor se ha comportado"…Bernanke vs. Trichet,
Dow vs. Euro Stoxx (Negocios.com – 16/10/07)
Esta semana se han vuelto a poner de
manifiesto las dos diferentes políticas que aplican los
bancos centrales estadounidense y europeo cuando los mercados
financieros se desestabilizan.
A Ben Bernanke, presidente de la Reserva
Federal de Estados Unidos, no le tembló la mano a mitad de
septiembre cuando decidió bajar los tipos de
interés 0,5 puntos. Puso por delante de los riesgos
inflacionistas, el objetivo de estabilizar a unos nerviosos
mercados a sabiendas que quizás esta es la primera medida
que hay que adoptar, cuando las cosas se complican en el mundo
económico.
Jean Claude Trichet, presidente del Banco
Central Europeo, ha hecho todo lo contrario. No se ha atrevido a
subir los tipos de interés en la zona euro por las fuertes
presiones recibidas en las últimas semanas especialmente
la del presidente de su propio país, Nicolás
Sarkozy. El francés Trichet los ha mantenido y parece que
no los va a subir en este último trimestre del año,
aunque su discurso no ha estado exento de
ambigüedad.
Lo que sí sigue habiendo a corto
plazo son problemas de liquidez en el sistema, al que le hubiera
venido muy bien una pequeña rebaja de tipos, y ya no
sólo por lo que hubiera supuesto por coste financiero,
sino también por la señal de confianza y apoyo que
el BCE hubiera lanzado a los mercados.
Así, por ejemplo, se
interpretó en Estados Unidos y Wall Street lo ha
agradecido con los máximos históricos marcados en
la última semana. De hecho, de todos los grandes
índices internacionales, es el primero que ha recuperado
las pérdidas de las subprime y el único que ha
alcanzado récord en este período.
Europa, como siempre, a su sombra. Vive
más los males de los americanos y no sabe disfrutar de los
buenos momentos.
"Las raíces de esta crisis eran
evidentes desde hace meses. Un número cada vez mayor de
deudores hipotecarios de alto riesgo, o subprime, estaba atrasado
en sus pagos. Los fondos de cobertura y otras instituciones
habían comprado valores complejos respaldados por esas
hipotecas, lo que arrojaba dudas acerca de su liquidez. Esa
mañana (9 de agosto) quedó claro que los bancos
europeos tenían más dinero comprometido en esos
instrumentos de lo que se había pensado. Eso
provocó una búsqueda frenética por conseguir
efectivo y una actitud reacia a prestar por parte de algunos
bancos que cruzó el Atlántico"… La
reacción de la FED ante la crisis del crédito
revela el "estilo" Bernanke (The Wall Street Journal online-
31/10/07)
La manera en que Bernanke manejó la
situación de agosto y su nivel de preparación
ofrecen la demostración palpable de cómo difiere de
su antecesor. Aunque es introvertido al igual que Greenspan,
Bernanke ha cultivado un proceso más abierto y de
colaboración. A Bernanke le gusta exponer todos los
aspectos de un debate y obliga a los participantes a poner a
prueba sus supuestos. También es más creativo a la
hora de encontrar maneras de estabilizar el sistema financiero y
no sólo se limita a usar el arma del recorte de las tasas
de interés que Greenspan desplegaba con mayor
facilidad…
Bernanke lleva toda su vida
preparándose para este tipo de crisis. En 1979
recibió su doctorado en economía del Massachusetts
Institute of Technology y pasó los siguientes 23
años en el mundo académico, principalmente en la
Universidad de Princeton. Durante gran parte de esos años,
se dedicó a estudiar cómo interactúan el
sistema financiero y la economía real, en especial durante
la Gran Depresión de los años 30…
"La Reserva Federal, el banco central
de Estados Unidos, rebajó este miércoles la tasa de
interés clave en un cuarto de punto porcentual, quedando
en 4,5%. La medida no causó sorpresa porque así lo
esperaban los mercados financieros. Ésta es la segunda
rebaja del año en el tipo de interés, que tiene
como objetivo tranquilizar el nerviosismo que ha ocasionado la
crisis hipotecaria en EEUU"… Bajan tasas de
interés en EEUU (BBCMundo.com –
31/10/07)
En esta ocasión se trata de un
cuarto de punto y no de medio punto, como la rebaja que se
llevó a cabo el 18 de septiembre. "La medida de este
miércoles, junto con la decisión tomada en
septiembre, debería ayudar a evitar algunos de los efectos
adversos sobre el conjunto de la economía que, de otra
manera, habrían surgido por los problemas en los mercados
financieros, y a promover un crecimiento moderado en el
transcurso del tiempo", señaló la FED en un
comunicado.
Los analistas indican que quizá las
autoridades están menos preocupadas sobre una
recesión. Pese a la falta de confianza de los consumidores
-descendió en octubre a su nivel más bajo en los
últimos dos años- otros indicadores señalan
que las cosas no van tan mal. Por ejemplo, según un
informe publicado esta semana, el gobierno aseguró que la
economía estadounidense creció en el tercer
trimestre a un ritmo de 3,9 % que es su nivel más elevado
en los últimos doce meses. Esto demuestra que, por el
momento, no se ha dado el contagio que tanto se temía.
Pese a la caída de inversiones, consumo y construcciones
de vivienda, otros sectores como el consumo interno, las
exportaciones, el gasto público, no han
decaído…
La FED, en su comunicado,
señaló que seguirá revisando las condiciones
de la economía en el futuro para actuar "como sea
necesario para fomentar la estabilidad de precios y un
crecimiento económico sostenible"…
"Ben Bernanke, el presidente de la Fed,
ha decidido quitar todas las restricciones a la liquidez en el
sistema financiero norteamericano ante la insuficiencia de las
medidas que ha tomado hasta ahora para frenar la crisis.
Así, ha anunciado este mediodía una nueva
inyección de liquidez conjunta con otros bancos centrales
de hasta 200.000 millones de dólares y a plazo de un mes,
frente al de un día (overnight) que regía hasta
ahora"… Bernanke al rescate: se alía con el
BCE para inyectar toda la liquidez que haga falta (El
Confidencial – 11/3/08)
Los bancos centrales que participan en esta
operación conjunta son el Banco de Canadá, el Banco
de Inglaterra, el Banco Central Europeo, la Reserva Federal y el
Banco Nacional de Suiza.
"Desde las medidas coordinadas adoptadas en
diciembre de 2007, los bancos centrales del G-10 han continuado
trabajando juntos, de manera estrecha y consultando regularmente
sobre las presiones en la liquidez de los mercados de
financiación. Las presiones en algunos de esos mercados
recientemente se han incrementado nuevamente. Todos continuamos
trabajando juntos y tomaremos medidas apropiadas para responder a
esas presiones en la liquidez", ha explicado la Fed en un
comunicado.
Bernanke ya anunció un aumento de
las inyecciones de liquidez que tenía en marcha para
intentar frenar los nuevos problemas de los mercados monetario y
de crédito: varias firmas financieras habían
incurrido en impagos en EEUU por su incapacidad para aportar
garantías adicionales (margin calls) a los bancos
acreedores ante el desplome del valor de sus activos, y las
tensiones en el interbancario habían conducido a un nuevo
repunte del Euribor en Europa y el US Libor en EEUU.
Pero esta medida no ha sido suficiente, a
la luz de la continuidad de las tensiones interbancarias, de los
nuevos problemas de impagos e incluso de las especulaciones de
problemas de liquidez de uno de los gigantes de Wall Street, Bear
Stearns. De ahí que Bernanke haya decidido cortar todas
las amarras y abrir la mano totalmente, haciendo honor al
sobrenombre de "Helicóptero Ben" (una vez dijo que la Fed
debía lanzar billetes desde un helicóptero si era
necesario).
La novedad de las inyecciones anunciadas es
que no se dirigen únicamente a los bancos, sino
también a otras instituciones como fondos de
inversión o brokers. Asimismo, aceptará como
garantía una gama más amplia de activos, como los
famosos ABS y MBS respaldados con créditos hipotecarios,
para los que no hay mercado en estos momentos.
"Las entidades no dan muestras de
viabilidad y los reguladores quieren ir más allá de
un plan de rescate"… La Fed piensa en un "banco basura"
que recoja todos los activos tóxicos (Negocios –
17/1/09)
Las renovadas dudas sobre la viabilidad de
los bancos estadounidenses obligan a los reguladores a un nuevo
plan que retiraría los activos tóxicos de los
balances de los bancos, en lo que podría convertirse en el
mayor intento hasta ahora de descongelar el
crédito.
Los asesores del presidente electo Barack
Obama ven una crisis bancaria cada vez más grave y
están considerando propuestas más atrevidas que las
medidas tomadas hasta el momento, según dos personas
próximas al plan.
"Necesitan hacer algo drástico",
dijo el profesor de la Universidad de Harvard Kenneth Rogoff, ex
economista jefe del Fondo Monetario Internacional y miembro del
grupo de treinta consejeros sobre asuntos financieros, que
incluye al secretario del Tesoro designado Timothy Geithner y a
Lawrence Summers, director entrante del Consejo Económico
Nacional.
Los funcionarios de la Reserva Federal de
Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés)
están centrándose en la opción de establecer
un llamado banco basura que adquiriría cientos de miles de
millones de dólares de activos problemáticos que
actualmente se encuentran en poder de los prestamistas. Esto
podría permitir a los bancos reducir las provisiones,
liberar capital y empezar a prestar más.
Paul Miller, analista bancario de Friedman
Billings Ramsey, en Arlington, Virginia, calcula que las
instituciones financieras necesitan hasta 1,2 billones en ayuda
nueva. Otras medidas que podrían estar siendo estudiadas
son proporcionar más garantías para activos
tóxicos que continúan en los libros de los bancos,
como los funcionarios hicieron con Citigroup en noviembre (2008)
y con los 118.000 millones de ayuda asignados ahora a Bank of
America, o comprar inversiones selectas. La presidenta de la
Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC),
Sheila Bair, ha desestimado la alternativa de nacionalizar
prestamistas.
Es probable que se tome una decisión
poco después de que Obama asuma la presidencia el 20 de
enero. La caída en las acciones de las empresas
financieras suma premura a las deliberaciones. Citigroup ha
llegado a caer por debajo del nivel que alcanzó cuando las
autoridades reguladoras salieron al rescate del prestamista en
noviembre, antes de anunciar su plan de segregación de
actividades. Bank of America cayó a un mínimo en 18
años porque la compañía solicitó
más ayuda del Gobierno.
"Gran parte del problema en todo esto es
que una vez que se produce un desastre financiero, la gente no
sabe dónde están enterrados los cadáveres",
dijo Paul Krugman, profesor de la Universidad de Princeton que
ganó el Premio Nobel de Economía de este
año, en una entrevista con Bloomberg Radio. "La gente
piensa quién sabe en lo que me estoy metiendo al prestar o
negociar con otros", afirmó.
"La Reserva Federal va a por todas y no
está dispuesta a que los mercados estropeen los enormes
esfuerzos por su parte y por parte del Gobierno para enfrentarse
a la crisis. Ayer lo dejó bien claro en el comunicado
posterior a la reunión, que venía a decir que,
aunque no puede bajar más los tipos, pretende controlar el
mercado de bonos para que una subida de los tipos a largo no eche
por tierra todas las medidas de estímulo"…
Bernanke: "Inversores, rendíos, os tenemos rodeados" (El
Economista – 29/1/09)
El comunicado de la Fed, pese a pintar un
panorama bastante negro para la economía, reconoce que las
expectativas de crecimiento e inflación van a cambiar, y
recuerda al mercado que puede ser peligroso ponerse en contra del
banco central si la situación de los bonos se pone fea. De
ahí que anuncie que está dispuesta a comprar bonos
del Tesoro si es necesario para "mejorar las condiciones en los
mercados de crédito".
En efecto, Bernanke espera una
mejoría en el segundo semestre gracias a planes como el
suyo de comprar activos hipotecarios por 500.000 dólares,
que ya ha conseguido una bajada de los tipos de las hipotecas:
"Una recuperación gradual comenzará a lo largo del
año", afirma el comunicado, aunque admite que hay riesgos
"significativos" para esta previsión. Asimismo,
señala que está colaborando con Obama sobre
fórmulas para rescatar al sector bancario.
Es decir, en la Fed saben que es probable
que las expectativas mejoren en los próximos meses con el
plan de estímulo del nuevo presidente y todo el dinero
público que ya se ha gastado en rescatar bancos y otras
empresas, y no quieren que dicha mejora se refleje directamente
en unas expectativas más inflacionistas y tipos a largo
más altos. Es decir, no quieren ver unos tipos que
exageren al alza descontando la vuelta de la inflación
después de que hayan exagerado a la baja por las
expectativas de deflación (y por la demanda de activos
seguros en medio del pánico financiero).
Concretamente, los analistas creen que la
Fed no está dispuesta a ver los tipos a largo por encima
del 3% y así se lo comunica a los mercados. La
rentabilidad del bono a 10 años ha subido del 2% al 2,7% y
la Fed dice que ya es suficiente. Básicamente, creo que
quieren estabilizar el tipo a largo entre un 2% y un 3%: por
encima del 3%, el mercado cruza la línea roja y pone en
peligro la recuperación, a juicio de Bernanke.
Ahora bien, tampoco quiere que los bonos
caigan por debajo del 2%, porque entrarían en terra
incognita en la historia de EEUU, lo que podría acelerar
una deflación prolongada. Es decir, la Fed está
marcando un rango entre el 2% y el 3% para los bonos, aunque no
lo va a reconocer, al menos por ahora.
El problema es que no está fijando
ese rango para los tipos del mercado monetario, que son su
responsabilidad, sino para el mercado de deuda pública,
donde no debería haber ninguna intervención
pública. La Fed está dispuesta a intervenir para
controlar uno de los mercados más grandes que existen
-mucho más que la bolsa-, lo que supone un acto de
intervencionismo sin precedentes, aunque a la altura de la
entrada masiva del Estado en el capital de los bancos.
Lógicamente, esta
intervención va a alterar completamente el comportamiento
de los inversores, que comprarán bonos en cuanto su
rentabilidad se acerque al 3% y los venderán cuando caiga
cerca del 2%. O tal vez eso es precisamente lo que pretende
Bernanke, que el mercado haga el trabajo sucio con estos mensajes
y que, al final, la Fed no tenga que comprar bonos directamente.
Y a lo mejor, hasta le sale bien.
"La Reserva Federal de Estados Unidos
dio ayer un pequeño paso hacia la compra de valores del
Departamento del Tesoro al señalar que está
preparada para hacerlo si estima que la medida representa un
alivio significativo para los mercados de crédito. El
banco central, sin embargo, no dio una señal clara de que
pondrá en marcha la estrategia"… La Fed muestra
señales de preocupación y está más
cerca de comprar deuda del Tesoro (The Wall Street Journal –
29/1/09)
La Fed ha rebajado su tasa de referencia de
corto plazo, conocida como de fondos federales, a casi cero y
reiteró después de una reunión de dos
días del Comité Federal de Mercados Abiertos que la
tasa se mantendrá baja "por algún tiempo". Las
autoridades ahora se están concentrando en nuevos
programas de préstamos y compras de activos.
El banco central de EEUU también
ofreció una sombría evaluación del panorama
económico y se refirió a las crecientes
preocupaciones de que la inflación pueda caer por debajo
de los niveles considerados prudentes. "La producción
industrial, la construcción de viviendas y el empleo
continúan cayendo de manera aguda, a medida que los
consumidores y las empresas recortan sus gastos",
señaló la Fed en un comunicado divulgado
después de la reunión. "Además, la demanda
global parece estar desacelerándose en forma
significativa".
La Fed tiene un cierto margen de maniobra
porque dos de sus nuevos programas de préstamos se
están reforzando. En uno, la Fed está comprando US$
600.000 millones en valores emitidos o garantizados por firmas
hipotecarias asociadas al gobierno: Fannie Mae, Freddie Mac,
Ginnie Mae y los bancos Federal Home Loan. En el otro,
proveerá financiamiento por hasta US$ 200.000 millones a
inversionistas que compren valores ligados a préstamos de
consumo.
En el comunicado, el banco central dijo que
compraría deuda gubernamental "si la evolución de
los acontecimientos" sugiere que eso podría ayudar a
aliviar la crisis de crédito. La Fed, sin embargo, no
ofreció ningún plan para realizar dichas compras.
La adquisición de bonos del Tesoro podría resultar
en una reducción mayor de las tasas. La iniciativa
también podría mantener bajas las tasas de
interés de una serie de préstamos ligados a valores
del gobierno, incluyendo hipotecas y deuda
corporativa.
Dichas medidas deberían ser
fáciles de ejecutar para la Fed porque tiene la autoridad
para comprar bonos del Tesoro y la división de mercado de
la Reserva Federal de Nueva York tiene un largo historial de
negociar bonos con operadores de valores. Pero la medida no
está exenta de riesgos. Uno de ellos es que la estrategia
puede tener un efecto contraproducente. Una compra a gran escala
de deuda gubernamental por parte de la Fed significaría
que el banco central está ayudando al gobierno a financiar
el creciente déficit fiscal al imprimir dinero, algo que
podría desatar presiones inflacionarias. Si esa es la
percepción de los inversionistas, los rendimientos de los
valores del Tesoro podrían subir, en vez de
caer.
Algunas autoridades de la Fed creen que el
principal riesgo en este momento no es un aumento significativo
de la inflación, sino su rápido declive. El
índice de precios al consumidor, excluyendo bienes
volátiles como los alimentos y la energía, se
contrajo a una tasa anual de 0,3% en el cuarto trimestre de 2008,
comparado con un alza de cerca de 2,5% en el mismo período
de 2007. "El Comité ve algún riesgo de que la
inflación persista por un período a niveles que no
son considerados ideales para estimular el crecimiento
económico y la estabilidad de precios a largo plazo",
declaró la Fed.
"El Departamento del Tesoro de Estados
Unidos encabeza el esfuerzo para diseñar un renovado plan
de rescate financiero, pero será la Reserva Federal (Fed)
la que, tras bambalinas, jugará un papel clave para
hacerlo funcionar"… La Fed jugará un papel clave en
el nuevo plan de rescate financiero de EEUU (The Wall Street
Journal – 10/2/09)
Los préstamos de la Fed son un pilar
del ambicioso programa dirigido a reanimar los mercados de
préstamos de consumo, que el gobierno planea ampliar en
alcance y, posiblemente, en magnitud.
El programa, conocido como Línea de
Crédito de Préstamos de Valores Respaldados por
Activos a Plazo (TALF por sus siglas en inglés), fue
anunciado en noviembre y originalmente tenía el objetivo
de proveer US$ 200.000 millones en financiamiento para
inversionistas que compren activos respaldados por
préstamos de consumo, como créditos para comprar
autos y deuda de tarjetas de crédito. Los funcionarios del
gobierno se han apresurado para lanzar el programa este
mes.
Ahora, el gobierno evalúa aplicar el
programa en otros mercados, por ejemplo el de los valores
respaldados por préstamos inmobiliarios comerciales y
créditos hipotecarios que no estén ligados a los
gigantes hipotecarios semiestatales Fannie Mae y Freddie
Mac.
El banco central tiene otros roles en el
rescate. Por ejemplo, podría ayudar a echar andar un banco
"agregador" dedicado a comprar activos financieros en problemas.
La Fed también podría garantizar los activos de
ciertas compañías, como ya lo hecho en los casos de
los bancos Citigroup Inc. y Bank of America Corp., aunque tales
planes probablemente no sean incluidos en el anuncio
próximo.
El banco central estadounidense
también ha estado trabajando de cerca con otros
reguladores para diseñar un programa para prevenir
ejecuciones hipotecarias. La planeada expansión del
programa TALF, sin embargo, probablemente sea su rol más
prominente. También representa un esfuerzo del gobierno
para separar dos problemas relacionados: sanear los bancos y
estimular el otorgamiento de nuevos préstamos.
Las autoridades tenían la esperanza
de que las primeras medidas para inyectar capital en los bancos
ayudaran a estimular la concesión de préstamos. En
gran parte, los esfuerzos han sido infructuosos. Ampliar el
programa TALF es una manera de crear créditos mientras se
elaboran otras medidas, como nuevas infusiones de capital o
ayudar a la banca a vender o "aislar" los activos
tóxicos.
"Lo que la Fed está haciendo es ir
de mercado en mercado y preguntar, "¿cuáles son los
mercados en los que el flujo de crédito está
dañado?"" explica Laurence Meyer, ex gobernador de la Fed
y actual vicepresidente de Macroeconomic Advisers LLC, una firma
de investigación económica.
La atención del gobierno del
presidente Barack Obama en el programa de préstamos de la
Fed también es un intento por abordar otro problema que ha
echado por la borda los esfuerzos por frenar la crisis de
crédito. Aunque el Tesoro ha estado inyectando capital
fresco en los bancos durante meses, muchos de los problemas del
sistema financiero radican fuera del sistema bancario, en
mercados donde los préstamos son parte de valores vendidos
a inversionistas de todo el mundo. En los últimos 25
años, estos mercados han pasado a dominar el sistema
crediticio de EEUU.
Aunque la Fed considera al TALF como una
manera de llegar a instituciones financieras que no sean bancos,
el programa está lleno de riesgos. El Banco de la Reserva
Federal de Nueva York ha luchado durante meses para definir las
condiciones para los créditos que otorgarán a los
inversionistas que acudan a la Fed en busca de financiamiento. Si
son muy estrictas, la iniciativa podría resultar
contraproducente. Si son muy laxas, podría incentivar un
acceso demasiado fácil al crédito o el programa
podría ser visto como un regalo para los inversionistas
privados.
"El jefe de la Fed cree que la
recesión podría acabar este año, pero las
cifras apuntan a que la crisis se agrava"… Ola de
malas noticias modera el optimismo de Bernanke (The Wall Street
Journal – 25/2/09)
El presidente de la Reserva Federal de
Estados Unidos, Ben Bernanke, albergó la esperanza de que
haya una recuperación económica en 2010. Sus
palabras, sin embargo, fueron pronunciadas en un día en
que las últimas cifras apuntan a una recesión cada
vez más obstinada y difícil de combatir.
En el mes de febrero (2009), la confianza
del consumidor estadounidense cayó a su nivel más
bajo registrado, en parte debido a que las familias tienen ahora
menos fe de hallar un empleo. Asimismo, dos índices
sugirieron que el declive en los precios de las viviendas se
podría estar acelerando. Y las empresas, desde el gigante
de software Microsoft Corp. a las cadenas minoristas Target Corp.
y Macy's Inc., reportaron un deterioro del panorama para las
ganancias corporativas.
Los últimos datos de la
economía y las crecientes aflicciones en las principales
instituciones financieras del país apuntan a uno de los
mayores problemas que enfrentan el presidente Barack Obama y
Bernanke: la crisis financiera y la recesión se
están retroalimentando. Los declives bursátiles y
el deterioro en sus carteras de préstamos disminuyen las
posibilidades de que los bancos recauden capital privado y los
vuelve más reacios a conceder créditos,
restándole dinamismo a la economía y ahondando el
problema que las autoridades federales tratan de paliar. Mientras
tanto, el aumento del desempleo y las caídas de las
ganancias corporativas elevan las moras en los préstamos,
perjudicando a los bancos y volviendo a consumidores y empresas
aún más reacios a gastar…
Los rescates financieros y un plan de
estímulo fiscal del orden de los US$ 875.000 millones
están diseñados para sacar a la economía
estadounidense de este espiral descendente. En su testimonio de
ayer ante el Congreso, Bernanke advirtió sobre el "poder
destructivo" de las crisis entrelazadas en los mercados y la
economía. Además, subrayó que detener este
sistema de retroalimentación es clave para reencauzar la
economía y añadió que existía el
riesgo de que el ya sombrío panorama actual
empeorara.
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